Descubre con Maclam el proceso más efectivos para el pulido de cristales| Maclam
1807
post-template-default,single,single-post,postid-1807,single-format-standard,bridge-core-3.0.2,qode-page-transition-enabled,ajax_fade,page_not_loaded,,paspartu_enabled,paspartu_on_bottom_fixed,qode_grid_1300,qode-content-sidebar-responsive,qode-theme-ver-28.8,qode-theme-bridge,wpb-js-composer js-comp-ver-6.9.0,vc_responsive
 

Descubre con Maclam el proceso más efectivo para el pulido de cristales

Descubre con Maclam el proceso más efectivo para el pulido de cristales

El vidrio es un material muy versátil conocido desde la Antigüedad. Compuesto por silicatos y carbonatos que se fusionan a altas temperaturas, se cree que los árabes descubrieron sus propiedades para fabricar binoculares. Aunque en un principio se empleaba sobre todo con fines ornamentales, sus usos se fueron ampliando con el paso de los años.

EL CRISTAL, UN MATERIAL CON EXCELENTES PROPIEDADES PERO DELICADO

 

Las propiedades ópticas del cristal no se alteran con el paso del tiempo. Este material refracta, absorbe y refleja la luz en proporciones diferentes. Además, al ser maleable en su etapa de fundición, puede tomar formas muy diversas.

En estado sólido, el cristal es resistente a la elasticidad, a la compresión y a la flexión. En cuanto a sus propiedades térmicas, conduce el calor y el frío por igual. Además, es uno de los mejores aislantes eléctricos conocidos.

El vidrio también es resistente a la corrosión, aunque existen sustancias que lo pueden dañar, como el ácido hidrofluorídrico. Por desgracia, esta es una de las sustancias que contienen los espráis y rotuladores con los que se hacen grafitis.

Su uso está muy extendido en fachadas, puertas y escaparates a pie de calle que sufren las inclemencias del tiempo, el efecto de la polución, salpicaduras y actos vandálicos.

Todo esto afecta a su apariencia. Por suerte, el vidrio puede recuperar su brillo y transparencia mediante las técnicas de pulido de cristales.

 

MÉTODOS DE PULIDO DE CRISTALES

Los cristales se pueden pulir utilizando diferentes técnicas. Existen métodos caseros, que son efectivos para disimular pequeños arañazos en objetos domésticos, como una mesa. Sin embargo, el pulido para superficies grandes o muy dañadas debe realizarse con técnicas profesionales como las que empleamos en nuestra empresa de protección de cristales.

El proceso de pulido del cristal para conseguir un acabado óptimo es el siguiente:

  1. Limpieza. En primer lugar, es imprescindible limpiar la superficie para eliminar la suciedad y poder localizar los arañazos y daños que se deben eliminar.
  2. Lijado inicial. Con una pulidora radial y un disco abrasivo se realiza un primer lijado para eliminar arañazos y marcas. Este proceso se realiza sobre toda la superficie para unificar la textura.
  3. Lijado avanzado. A continuación, se realiza un segundo lijado con granos más abrasivos.
  4. Matizado. Una vez eliminados los daños del cristal, se matiza el pulido mediante discos de esponja que suavizan la superficie.
  5. Pulido. Una vez reparada la superficie, es preciso devolverle su brillo y transparencia. Este es el pulido propiamente dicho, que se realiza con discos de fieltro y una pasta que elimina todo resto de rayas.

Este último proceso se debe repetir hasta que la superficie está completamente fina y transparente.

Para proteger el cristal y mejorar sus propiedades de resistencia y aislamiento, es recomendable instalar láminas de protección solar. Estas películas, además de mejorar las condiciones térmicas del interior, protegen de los rayos UV.

Si quieres más información sobre el pulido de cristales, contacta con nuestra empresa de protección de cristales. Estaremos encantados de solucionar todas tus dudas.

 

SI TE HA GUSTADO ESTE POST SOBRE «Descubre con Maclam los métodos más efectivos para el pulido de cristales» SEGURAMENTE TE INTERESARÁ…