
29 Sep ¿Conoces cuáles son las características de los cristales de seguridad?
El vidrio es uno de los elementos constructivos que más se utilizan actualmente en las edificaciones. Estamos acostumbrados a ver fachadas acristaladas en hoteles, edificios de oficinas, bancos, comercios y también en edificios de viviendas.
Gracias a los acristalamientos se consiguen edificios más eficientes desde el punto de vista energético porque se aprovecha mejor la luz solar. Estos vidrios tienen unas características y por eso los conocemos como cristales de seguridad.
TIPOS DE CRISTALES DE SEGURIDAD
Los cristales de seguridad pueden ser de diferentes tipos: vidrio laminado, templados, bajo emisivos… Te contamos en qué consiste cada uno de ellos.
El vidrio laminado o vidrio de seguridad es un material muy resistente que, además, proporciona un elevado nivel de aislamiento acústico. Dependiendo del grosor del vidrio de seguridad obtendremos más o menos beneficios.
Las láminas que forman los cristales de seguridad se unen mediante un adhesivo especial denominado polivinil butiral (PVB). Este material proporciona excelentes cualidades de adherencia, elasticidad, transparencia y resistencia.
Gracias a ello, si se rompe el vidrio, los fragmentos de cristal no se caen sino que permanecen adheridos. Este sistema aporta protección frente a intrusos y previene accidentes, ya que evita el riesgo de cortes.
Otro de los cristales de seguridad más empleados es el vidrio templado. El vidrio templado se somete a tratamientos térmicos o químicos para aumentar su resistencia. Es el que se usa habitualmente en las mamparas y escaparates.
En ocasiones, se combinan en uno solo ambos tipos para obtener un material mucho más seguro y aislante.
El vidrio laminado puede tener diferentes grosores, que se eligen en función de su uso. La nomenclatura está formada por dos números que indican el grosor de las placas de vidrio y más otro que indica el número de láminas de PVB.
La composición del adhesivo PVB no altera la transparencia ni la durabilidad del vidrio. Además, este material puede mejorar sus cualidades añadiendo protección frente a los rayos UV, causantes del calor y la decoloración.
Cuando el vidrio ya está instalado se pueden mejorar sus propiedades colocando láminas de protección solar. Estas películas imperceptibles protegen de la radiación ultravioleta y aumentan la resistencia del vidrio.
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